Este grupo ha sido para mi uno de las mayores y mejores sorpresas musicales de mi vida. Desde el primer momento en el que los oí me cautivaron lo maravilloso sus letras, la excepcionalidad de la voz de Steve y esa gran capacidad que tenían de mezclar la más romántica de las canciones (como "Heaven" o "One life one soul" por ejemplo) con puro rocken vena("Lift U Up", "Anytime Anywhere"...).
Tuve la grandísima suerte de poder verlos en directo en Bilbao el pasado año, y desde aquel día juraba y perjuraba que volvería a pagar para disfrutar de ellos en cuanto se presentase la ocasión. Pero Dios y un camión se aliaron el pasado 7 de octubre para sesgar de un golpe la vida de Steve, y de paso, mis ilusiones de poder verles de nuevo.
Porque si algo destacaba de él (aparte de su increíble voz, claro) era su gran carisma en el escenario, su habilidad para ganarse al público en cada una de sus actuaciones. Y aunque su fiel escudero Leo Leoni, guitarrista principal del grupo, y los demás encuentren otro cantante para suplirle, Gotthard nunca será lo mismo sin Steve.
Para finalizar, solo comentar que espero y deseo que Lee haya encontrado, como pide en la canción "Heaven", un lugar en el paraíso, que es el sitio que se ha ganado a pulso. Descanse en paz.
